viernes, 15 de mayo de 2009


EL FEUDALISMO

El feudalismo fue un sistema contractual que se dio en los siglos VIII y IX , este unía la prestación política y militar a la posesión de tierras con el propósito de preservar a la Europa medieval de su desintegración en innumerables señoríos independientes tras el hundimiento del Imperio Carolingio.

CARACTERISTICAS
-unos tenían la propiedad de la tierra: señores feudales, y otros solo derechos de uso y ocupación: vasallos
-Los vasallos y el señor feudal tenían estrechos lazos de dependencia.
-El señor feudal ejercía el máximo poder.
-La autoridad de los reyes ere casi nula.
-Había fraccionamiento político.
- La economía del feudo era agrícola y de carácter cerrado.


DERECHO FEUDAL
“El derecho feudal fue expresivo de normas tendientes a desarrollar y consolidar el orden socio‑jurídico feudal y la relación feudo­-vasallática”, surge hacia fines del siglo IX y principios del X como un derecho consuetudinario formado por las nor­mas que van dictando por los señores feudales.
CARACTERISTICAS DEL DERECHO FEUDAL
-Era un derecho clasista y de jerarquización, que mantenía subordinados y oprimidos a los estamentos de la población.
-Había fraccionamiento el poder público y varias soberanías en un mismo estado.
-Es un derecho consuetudinario.
-Fuerte influencia del Derecho canónico.
-Fuerte influencia de la iglesia.

DECADENCIA
El feudalismo alcanzó el punto máximo de su desarrollo en el siglo XIII, a partir de entonces inició su decadencia, esta se aceleró entre los siglos XIV y XV afectado por las guerras en Europa, y por las grandes epidemias de peste del siglo XIV que borraron del mapa a Aldeas enteras, “a medida que el feudalismo desaparecía, surgía, a su vez, una clase media comercial y rica que disponía de los recursos y tiempo necesarios para participar en los asuntos de gobierno”, esta burguesía dio origen a la centralización de poder en un soberano, pues necesitaban de un gobierno central fuerte que mantuviese el orden y les brindara situación estable para el desarrollo del comercio, así se da la llamada monarquía estamental que luego termina en una monarquía absoluta, causada por el decaimiento de los señores feudales y de la burguesía.

lunes, 11 de mayo de 2009

IMPERIO BABILONICO




La ciudad de Babilonia (del acadio Bāb-ilim o Babilu, ‘puerta de Dios’), fue uno de los más importantes centros urbanos durante los milenios II y I a.C. Situada al este del río Éufrates, a 90 km al sur de Bagdad, en irak, su mayor esplendor correspondió al reinado del monarca de la dinastía neobabilonia (caldea) Nabucodonosor II, que tuvo lugar desde el 605 hasta el 562 a.C.

HISTORIA
Hacia finales del III milenio a.C., el reino de Sumer y Acad cubría una gran zona regida por una dinastía sumeria conocida como la III Dinastía de Ur. La migración de un gran grupo de nómadas semíticos, los amoritas, o amorreos provenientes del oeste de Mesopotamia se asientan en una pequeña ciudad sumeria, Babilonia.
Babilonia se hizo una ciudad-estado independiente hacia el 1894 a.C., cuando el amorreo Sumu-Abum fundó allí la primera dinastía amorita una dinastía. Esta dinastía alcanzó su apogeo con Hammurabi. En el 1595 a.C. la ciudad fue capturada por los hititas, y poco después por los casitas (hacia 1590-1155 a.C.). Los casitas transformaron la ciudad-estado de Babilonia en la capital de Babilonia, región al sur de Mesopotamia.Después, probablemente en el siglo XII a.C., se convirtió también en centro religioso del reino, cuando su dios principal, Marduk, fue situado a la cabeza del panteón mesopotámico.
En el 1158, la dinastía casita cayó en manos de los elamitas del este, y Babilonia fue regida por distintas y breves dinastías hasta finales del siglo VIII a.C. cuando cayó bajo la influencia de Asiria. En el 625 a.C., los caldeos, dirigidos por Nabopolasar, tomaron la ciudad.
Nabopolasar fundó la dinastía neobabilonia, y su hijo Nabucodonosor II extendió el reino hasta Palestina y Siria. Babilonia fue entonces la mayor ciudad del mundo conocido, abarcando más de 1.000 hectáreas pero luego e
En el 539 a.C., Ciro II el Grande capturó Babilonia y la incorporó al recién fundado Imperio persa.

CARACTERISTICAS
La civilización babilonica era de carácter urbano, aunque se basaba en la agricultura más que en la industria, estaba compuesto por unas doce ciudades, rodeadas de pueblos y aldeas. A la cabeza de la estructura política estaba el rey, monarca absoluto que ejercía el poder legislativo, judicial y ejecutivo. Por debajo de él había un grupo de gobernadores y administradores selectos. Los alcaldes y los consejos de ancianos de la ciudad se ocupaban de la administración local.
La sociedad babilónica estaba compuesta por tres clases sociales representadas por el awilu, persona libre de clase superior; el wardu, o esclavo; y el mushkenu, persona libre de clase inferior, que se encontraba legalmente entre el awilu y el wardu.
Hammurabi, rey de Babilonia, unificó las distintas entidades políticas de Mesopotamia durante su reinado (hacia el 1792-1750 a.C.), y creo el Código de Hammurabi, que es un conjunto de leyes y edictos recopilados por este rey, que se constituye como el primer código conocido de la historia de carácter legislativo. Una copia del mismo, esculpida en un bloque de piedra negra de dos metros de alto, fue encontrada por un equipo de arqueólogos en Irán en 1901-1902.
El Código está compuesto por columnas horizontales en escritura cuneiforme: 16 columnas en el anverso y 28 en el reverso. El texto comienza con un prólogo que explica los cultos religiosos de Babilonia y Asiria.
Comienza con una guía de procedimientos legales, imposición de penas por acusaciones injustificadas, falso testimonio y errores judiciales. A continuación se recogen disposiciones sobre el derecho de propiedad, préstamos, depósitos, deudas, propiedad doméstica y derechos familiares. El Código de Hammurabi no contiene normas jurídicas acerca de temas religiosos. Las bases del Derecho penal derivan del principio, común entre los pueblos semitas, del “ojo por ojo”. La protección del Código se ofrece a todas las clases sociales babilónicas.
Finaliza con un epílogo que glorifica la labor realizada por Hammurabi e indica que el monarca fue llamado por los dioses para que “la causa de la justicia prevalezca en el mundo, para destruir al malvado y al perverso” y “el fuerte no pueda oprimir al débil, y la justicia acompañe a la viuda y al huérfano”.

HISTORIA DEL ISLAM


El islam es una religión que se extiende sobre todo por Oriente Medio, el sureste de Asia y todo el norte de África.
La palabra islam procede de la lengua árabe y significa ‘sumisión’ u ‘obediencia’ a Dios. Sus creyentes son los musulmanes, palabra que significa ‘los que siguen el islam’. El fundador del islam fue un profeta llamado Mahoma. El islam se divide en dos ramas fundamentales: los sunitas (que siguen la línea directa de Mahoma) y los chiitas (descendientes de Alí, yerno de Mahoma). Los primeros constituyen la inmensa mayoría de los musulmanes.

VIDA Y OBRA DE MAHOMA
Mahoma nació en La Meca, una ciudad de Arabia, hace más de 1.400 años, en el seno de una familia muy humilde. Su padre y su madre murieron cuando él era muy pequeño, por lo que creció en casa de su tío paterno. La Meca está situada en medio del desierto, y, en aquella época, la habitaban tribus que vivían del comercio. Esta actividad comercial se realizaba con caravanas de camellos, y Mahoma trabajó de caravanero. En aquellos años conoció a una mujer rica, llamada Jadiya, y se casó con ella.
Un día, mientras Mahoma estaba en medio de una meditación profunda en una cueva próxima a La Meca, tuvo una visión del arcángel Gabriel. En esa visión, Alá le revelaba, le descubría, el contenido de un libro sagrado, el Corán, y le ordenaba que predicase la nueva religión, el islam. Mahoma tenía entonces cuarenta años.
Las ideas de paz, igualdad y orden para todos los seres humanos que, a partir de ese momento, Mahoma predicó no gustaron a quienes tenían el gobierno de La Meca, y le persiguieron a él y a sus seguidores. Por ello, Mahoma tuvo que escapar apresuradamente de esta ciudad y marcharse a Medina, donde reanudó su predicación. Esta huida de La Meca a Medina, que se produjo en el año 622 de nuestra era, se llama Hégira, y señala el principio del calendario islámico. Mahoma murió diez años después, cuando el islam ya se había extendido por toda Arabia.


PRINCIPALES CREENCIAS DEL ISLAM
En el islam existen cinco artículos de fe. Un buen musulmán ha de tener:
1. Fe en Alá, como el único dios. La profesión de fe del islam dice: No hay más dios que Alá.
2. Fe, asimismo, en los ángeles de Dios.
3. Fe en los libros sagrados, especialmente en el Corán.
4. Fe en los profetas, especialmente en Mahoma.
5. Fe en la vida después de la muerte.

LOS CINCO DEBERES DEL ISLAM
para el musulmán existen cinco deberes fundamentales, los llamados pilares del islam, que son los siguientes:
1. La sumisión a Alá como dios único.
2. La oración. El musulmán debe rezar cinco veces al día, en unos momentos precisos, e inclinado hacia La Meca: al amanecer, al mediodía, por la tarde, a la puesta del Sol y al anochecer. Además, antes de rezar, ha de lavarse especialmente la cara, los pies y las manos, porque eso significa que se presenta puro para rezar.
3. La limosna. Los musulmanes que tienen una cierta posición económica han de dar limosna a los pobres o necesitados.
4. El ayuno. Hay que ayunar de día, mientras haya Sol, durante un mes seguido, que se llama Ramadán. Mientras es de día, no se puede comer ni beber nada.
5. Si tiene medios económicos, el musulmán debe peregrinar una vez en su vida a La Meca, durante unos días precisos del año.
Además de los preceptos o leyes anteriores, los musulmanes siguen unas costumbres propias. Por ejemplo, el musulmán no puede comer carne de cerdo ni tampoco puede beber vino o cerveza ni probar el alcohol.
El libro donde se recogen estos y otros preceptos es el Corán, este es el libro sagrado de los musulmanes. Contiene todos los preceptos fundamentales del islam, así como numerosas recomendaciones de conducta que permiten a los creyentes llevar una vida honesta según los principios de su religión.

ORIGEN DEL CORÁN
Para los musulmanes, el Corán contiene la palabra de Dios, Alá, tal y como le fue revelada al profeta Mahoma en varios momentos de su vida. La primera revelación le llegó a través del arcángel Gabriel, cuando Mahoma se encontraba en una profunda meditación, dentro de una cueva próxima a la ciudad de La Meca, en el año 612. El profeta contaba entonces cuarenta años. Con posterioridad, hasta el 632, año en que murió, Mahoma siguió recibiendo nuevas revelaciones, más detalladas, de la palabra de Dios.
Al principio, el Corán se transmitió oralmente de unos creyentes a otros, hasta que, finalmente, unos años más tarde, se puso por escrito. Está redactado en árabe.
La obra está dividida en un total de 114 capítulos, llamados suras. Cada una de ellas se divide, a su vez, en versículos, o aleyas.
El Corán no solo contiene el mensaje de Alá y las cuestiones relativas a la religión o creencia musulmana, sino que transmite también el conjunto de leyes que han de seguir las sociedades musulmanas.

ANTIGUA GRECIA

PRIMERAS CIVILIZACIONES GRIEGAS

Hace 5.000 años comenzó en Grecia la edad del bronce. Se desarrolló entonces la llamada civilización del Egeo, cuyas dos principales culturas fueron las siguientes:
Cultura minoica (2000-1450 a.C.).
Cultura micénica (1450-1100 a.C.).

Aproximadamente 1.000 años después, se produjeron las invasiones de pueblos del norte que hablaban una lengua indoeuropea: los aqueos, los dorios, los jonios y los eolios.
En aquella época, los antiguos griegos comenzaron a colonizar las costas de Asia Menor (la actual Turquía). Varios siglos después, (hace unos 2.700 o 2.500 años), los griegos fundaron colonias en lugares como Sicilia, en el sur de la actual Francia (la ciudad de Marsella) o la costa oriental de la península Ibérica.

EL PERIODO HELÉNICO
Todos esos pueblos se llamaban a sí mismos helenos. Su organización política se fundamentaba en numerosas ciudades-estado que se relacionaban unas con otras de diversas formas.
En la costa de Asia Menor nació la filosofía griega. Se extendieron la lengua griega, la religión (el santuario de Delfos fue el mayor y más respetado) y los juegos (entre ellos, los más famosos: los olímpicos).

Atenas y Esparta se convertieron en las dos principales ciudades-estado de Grecia.

Esparta:
Estableció su poder sobre la base de una sociedad muy militarizada, logró numerosas conquistas y gobernó sus territorios de forma muy estricta a traves de los siguientes organos:

Reyes: 2 reyes de titulo era hereditario, su poder estaba limitado por los demás órganos de gobierno.
Gerusía: Era una especie de consejo de ancianos integrado por los 2 reyes y 28 miembros que se encargaba de la redacción de las leyes, la diplomacia y actuaba en algunos casos como tribunal de justicia.
Apella: Era una asamblea popular integrada por los espartanos mayores de 30 años que tenia funciones consultivas
Eforado: Integrado por 5 eforos, inspecciónaban los asuntos estatales y controlaban el desempeño de los funcionarios públicos.

Clases sociales de Esparta:
Espartanos: eran el grupo dominante .
Ilotas: eran esclavos del estado y no poseían derechos. Su trabajo sustentaba a los espartanos.
Periecos: Eran hombres libres, no tenían derechos políticos pero si económicos.

Atenas:
controló su propia zona de forma pacífica. Se puede decir que, hace unos 2.500 años, nació en Atenas la democracia.
el gobierno de Atenas tenia 2 principales instituciones:
El Arcontado: Estaba integrado por nueve miembros, uno de ellos era el rey. Uno de los arcontes comandaba el ejercito ateniense y el resto tenía funciones judiciales.
El Areópago: máxima de la ciudad, integrado exclusivamente por eupatridas. Eegian los arcontes.

A comienzos del siglo V a.C., los griegos se enfrentaron a Persia en dos guerras, las Guerras Médicas, que supusieron la victoria de los griegos sobre los invasores persas.
Durante ese siglo V a.C., se produjo la hegemonía (la supremacía) ateniense: fue la Edad de Oro de Atenas. El principal político ateniense fue Pericles. La democracia se consolidó como sistema político, se construyó el Partenón, se desarrolló el teatro, nació el estudio de la historia gracias a Heródoto y destacó el filósofo Sócrates.


Pero el final de aquel siglo coincidió con el enfrentamiento entre Atenas y Esparta en la guerra del Peloponeso: la victoria final de los espartanos supuso el dominio de Esparta sobre Grecia durante los siguientes treinta años (los primeros del siglo IV a.C.).
En aquella época surgió un reino en el norte de Grecia que acabaría por dominar a todo el mundo helénico: Macedonia. En el 336 a.C., Alejandro Magno se convirtió en su rey y pronto invadió Persia. Durante los siguientes diez años, sus conquistas propagaron la influencia, la cultura y la lengua griegas hasta el norte de India y Egipto.
Cuando Alejandro Magno murió, en el 323 a.C., los generales macedonios se repartieron su vasto imperio. Este periodo duró hasta que Grecia se convirtió en provincia romana, en el 146 a.C.

http://www.youtube.com/watch?v=499ksnqxOxQ&feature=related

LA ANTIGUA ROMA






Cuando hablamos de la antigua Roma nos estamos refiriendo a un largo periodo de tiempo en el que esta ciudad fue la más importante del mundo. Eso ocurrió durante la edad antigua, entre el 753 a.C. (año en que la leyenda y la mitología sitúan la fundación de Roma) y el 476 d.C. (cuando fue derrocado el último emperador romano).



La historia de la antigua Roma se divide en tres grandes etapas:
Monarquía (753 a.C.-510 a.C.).
República (510 a.C.-27 a.C.).
Imperio (27 a.C.-476 d.C.).
Esos tres periodos se diferencian por su forma de gobierno: durante la Monarquía, gobernaban los reyes; durante la República, el principal órgano de poder fue el Senado; durante el Imperio, el máximo dirigente de Roma y sus territorios era el emperador.

LA MONARQUÍA ROMANA (753 A.C.-510 A.C.)
Parece ser que, durante los primeros 243 años de historia de Roma, siete reyes se sucedieron en su trono. Como fueron los tiempos más remotos de la ciudad, los historiadores tienen que averiguar la verdad entre muchos datos que pueden pertenecer a lo legendario o mitológico. Empezando por los orígenes de la propia Roma, que, según la leyenda, nació en el año 753 a.C., cuando fue fundada por dos hermanos: Rómulo y Remo.
El primer rey fue el propio Rómulo. El último se llamó Lucio Tarquino el Soberbio.
Durante esta época, Roma fue extendiendo su poder hacía las regiones vecinas. En estos tiempos ya existía la que sería la asamblea más célebre de su historia: el Senado.

LA REPÚBLICA ROMANA (510 A.C.-27 A.C.)
Durante los siguientes 483 años, el sistema político romano fue el republicano (no existía un rey). Como esta etapa duró casi cinco siglos, conviene que la subdividamos para que conozcas y recuerdes mejor sus acontecimientos más importantes.
Establecimiento de la República y conquista de la península Itálica (510 a.C.-264 a.C.). Para sustituir la figura del rey, el conjunto de los ciudadanos elegía cada año a dos cónsules. El Senado, que se convirtió en el órgano fundamental de poder, ya no estaba solo formado por los patricios (miembros de las familias más ricas), sino que también entraron en él los plebeyos (los ciudadanos libres pero pobres). Durante esta fase, Roma consolidó su dominio sobre la mayor parte de los pueblos que habitaban la actual Italia.
Las Guerras Púnicas (264 a.C.-146 a.C.). Durante el siguiente periodo de la historia de la República, Roma, que centraba su poder en la península Itálica, mantuvo tres guerras con la mayor potencia marítima de la época: Cartago. Roma venció en los tres enfrentamientos, conquistó las islas de Sicilia, Cerdeña y Córcega, y hasta destruyó la propia ciudad de Cartago. Obtuvo así el control del mar Mediterráneo. ¿Por qué? Porque sus territorios se extendieron al norte de África, Hispania, Grecia, Asia Menor y Siria. Roma se convirtió en una gran potencia naval.
Crisis internas y fin de la República (146 a.C.-27 a.C.). La conquista de tantos territorios terminó por originar problemas internos en Roma. Los enfrentamientos se produjeron entre dos ‘partidos’: el aristocrático y el popular. De forma paralela, las legiones romanas (los ejércitos) siguieron ampliando la extensión del que ya era un gran imperio territorial. Uno de los jefes militares más importantes de aquellas conquistas fue Julio César, el cual, hacia el 60 a.C., tenía un gran prestigio y lideraba el partido de los populares. Se convirtió poco después en cónsul, pero fue asesinado en el 44 a.C. Su sobrino nieto Octavio obtuvo en el 31 a.C. el poder total sobre los territorios gobernados por Roma. Cuatro años más tarde, recibió del Senado el título de ‘augusto’, acto que se considera el inicio del periodo imperial.

EL IMPERIO ROMANO (27 A.C.-476 D.C.)
Durante los 503 años siguientes, Roma estuvo gobernada por familias:
Dinastía Julio-Claudia (27 a.C.-68 a.C.). Como ya dijimos, el primer emperador romano fue Octavio (al que se llamó Octavio Augusto). Gobernó entre el 27 a.C. y el 14 d.C. Aquellos años fueron conocidos como era Augusta y supusieron un gran esplendor del Imperio romano. El último emperador de la familia de Augusto (la dinastía Julia-Claudia) fue Nerón, derrocado en el año 68.
Dinastías de los Flavios y de los Antoninos (69-192). Los emperadores de la dinastía de los Flavios fueron Vespasiano, Tito y Domiciano. Les sucedieron los miembros de la familia de los Antoninos (Nerva, Trajano, Adriano, Antonino Pío, Marco Aurelio, Vero y Cómodo), emperadores entre el 96 y el 192.
Cuando falleció Teodosio I el Grande, en el 395, sus dos hijos se repartieron el imperio romano: Arcadio se convirtió en emperador de Oriente, y Flavio Honorio, en emperador de Occidente. En el siglo V, el Imperio romano de Occidente sufrió las invasiones de los pueblos germanos. Rómulo Augústulo, último emperador de Occidente, fue depuesto en el 476 por el jefe de los hérulos, Odoacro.
Finalizaba así la historia del Imperio romano. Aunque todavía siguió existiendo el llamado Imperio de Oriente o Imperio bizantino, que perduraría hasta 1453.

INFLUENCIA DE ROMA

El latín. Esta lengua pasó a ser hablada por los pueblos conquistados, que luego la adaptaron, dando lugar así a las lenguas romances o románicas (entre ellas, el español).
El Derecho romano.